jueves, 4 de octubre de 2012

R2-L3 (STAR WARS: THE LEGACY COLLECTION)

Build-A-Droid, Wave 5, 2008.
Tanto en las fases azul como roja de la Legacy Collection, el bonus añadido a las Figuras Básicas consistente en piezas de droides para construir algunos de estos personajes salidos de la saga de Star Wars deparó excelentes momentos. Según los expertos en estas cosas, la Legacy Collection volverá en 2013 sustituyendo a la Vintage Collection y de nuevo con el añadido de estos droides troceados a reconstruir con cada una de las Figuras Básicas (o bien comprarlos de forma individual en ebay), lo que supone una pequeña alegría.
R2-L3, pese a ser un personaje originario de El Ataque De Los Clones, fue incluido en la serie 5 de la colección constituida por figuras de Una Nueva Esperanza. Una serie fantástica de grandes figuras, por cierto, culminadas por la inclusión de dos excelentes Build-A-Droid, R2-L3 y el encantador R5-A2.
Pero acabo de mentir: R2-L3 no es una figura excelente. Es de una magnificencia indecorosa. Construido con el mismo molde y número de piezas que los otros droides astromecánicos de la Legacy Collection, la labor efectuada por Hasbro en su decoración deja sin aliento, en especial a los fans de los droides astromecánicos, por supuesto.
El principal color que domina en la figura es el rojo, haciéndola totalmente llamativa, pero detalles blancos se dejan ver aquí y allá, sobre todo a medida que descendemos y apreciamos que su parte inferior y sus patas son mayoritariamente blancas con el cableado de sus "pies" en negro. En el cuerpo del droide apreciamos con más claridad el sensacional trabajo de pintura, con multitud de finas líneas negras sobre todo en el domo y pequeños detalles en azul en sus componentes electrónicos. Culmina el conjunto el gris plateado especialmente destacable en el domo y en la pieza que rodea su visor, éste de un negro profundo.
Pese a no disfrutar del mejor de los moldes para los droides astromecánicos (el increíble molde usado en R2-X2) su construcción es sólida y responde perfectamente a lo que de él se exige: seis puntos de articulación, pierna central que se puede retirar y pequeñas ruedas en las bases de sus patas para que este pequeñín pueda rodar sin problemas.
Una pieza ya imprescindible en mi colección, y de la que podemos hacer un resumen bastante clarificador: un excelente droide astromecánico que reproduce en plástico al que aparece brevísimos segundos en el Episodio II, vagando por las calles del puerto espacial de Mos Espa, una aparición totalmente anecdótica, pero al que se le otorgó una decoración que supera en mucho a la de la mayoría de droides astromecánicos que nos ha entregado Hasbro, es decir, de personajes mucho más importantes y relevantes en la Saga. ¿Qué cosas, no?
David

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